Cayó en mis manos "La luna nómada" de Leonardo Valencia

Atraída por el título, no dudé en comprarlo. Reconozco que más de una vez compré un libro porque el título despertó en mí alguna sensación, y, en este caso, esas dos palabras fueron determinantes.

Luna y nomadismo. C´est tout.

Y dos citas que aparecen en él:

“El siniestro espíritu del cosmopolita: esa consecuencia poco confortable de haber conocido muchas tierras y no sentirse en casa en ninguna”, Henry James

“No sentirse en casa en ninguna parte pero sentirse bien casi en todos los sitios”, Georges Perec

Cuando nombro ciertas palabras tales como raíz u origen realmente me atemoriza. El peso de las mismas es tan contundente que caen en seco al suelo, a la tierra. Como si un ladrillo fuera lanzado con fuerza. Y anhelo tocar la tierra, desplazarme sin apenas ser elevada, pero algo me impide seguir caminando. Un golpe de viento traspasa de manera súbita mi cuerpo, y éste se convierte en algodón. Y el algodón se deshace y es entonces cuando empieza a volar y, de repente, los pedacitos de algodón se posan en varios lugares, en varias tierras.

Me elevo y en el instante más inesperado caigo en seco a la tierra.

Recupero mis raíces, esté donde esté. Pero el vuelo es tan acelerado, tan siniestro y tan arrebatador que las raíces empiezan a diluirse… y mis casas se multiplican.
Y las “mis” pasan a ser “las”.
Y las miradas ya no son las mismas.
Y ahora existen contrastes.

Los pedacitos de algodón se desplazan sin rumbo. Rojo, violeta, azul, amarillo, negro atrapan los pedacitos. Los colores ya no se van más.
Marzo´07

Fotografía tomada en la parte trasera de una camioneta que nos llevó a Cabo Polonio (Uruguay), un lugar perdido... en julio 2006, invierno en Sudamérica.

"Nomadismo e itinerancia , de regreso al no lugar". Caterine Galaz

"El término nomadismo se utiliza comúnmente para referirse a un tipo de vida que se caracteriza por la errancia permanente y la deambulación territorial. Sin embargo, ya algunas perspectivas teóricas comienzan a utilizar la idea de nomadismo como una metáfora que posibilite referirse al tránsito y al cambio permanente, al no lugar fijo, no sólo a nivel geográfico sino también en las formas de pensamiento, de sentimientos y de valores. La idea de nomadismo está relacionada con el deseo antropológico de libertad y movimiento de cada persona, que le lleva a navegar en su identidad a través del tiempo, e incluso a transgredir las normas sociales.
Una de estas voces es Michael Maffesoli, profesor de la Universidad de La Sorbona, quien destaca la disconformidad que manifiestan algunas personas dentro del sistema mundial para aceptar tener un sólo espacio en la vida, sea este entendido como un solo domicilio, o bien como identidad profesional, sexual o cultural, una postura ideológica o la visión tradicional de familia. Así existirían personas que optan por posiciones más abiertas a los cambios o a la movilidad en estos aspectos.

El orden y el intento de difundir un único pensamiento sociocultural como realidad aceptable, dejando afuera de lo que se considera como "normal" a otras expresiones, llevaría a que ciertos grupos de personas sintieran y respondieran a contracorriente, con actuaciones que los liberen de esos espacios fijos y cerrados.

Esas personas son los «nuevos nómades» dentro de un sistema de pensamiento que les coarta su expresión. Es una forma de escape del cuerpo y además de la razón ante el creciente deseo de mudanza."